Las marcas Bespoke, o a la medida, nos ofrecen experiencias y productos únicos y sin comparación. Sin embargo, la industrialización del lujo también es una realidad moderna, y aún las mejores marcas dependen de la producción en masa para cumplir con las demandas del mercado. Por ello es especialmente notorio cuando una marca de lujo puede olvidarse de la tentación de la producción en serie, siendo esta la razón de que busquemos fehacientemente las ediciones limitadas. Aún entonces, muy pocas marcas pueden hablar de crear experiencias completamente únicas e irrepetibles, y una de estas marcas es Rolls-Royce, la casa responsable de los diseños automotrices más exclusivos.
Mientras que la producción de los Rolls-Royce siempre ha sido algo digno de admiración y le han valido a la marca una reputación de excelencia, ahora la casa ha retomado un camino distinto: en 2021 han optado por el coachbuilding, el arte de crear un auto completamente desde cero. Un servicio antiguamente ofrecido por la marca, su capacidad de cumplir los deseos del cliente en cada etapa del proceso es incomparable, y ahora se ve reflejada en la edición ultra exclusiva del Rolls-Royce Boat Tail.
Con únicamente tres unidades, el Boat Tail fue concebido en colaboración directa con el cliente, asegurando que aunque los tres vehículos compartieran una silueta en común, cada uno sería completamente individual. El proceso de diseño asegura que los requisitos impuesto por el cliente son cumplidos a la perfección, llegando al punto de hacer un prototipo de tamaño real en arcilla para validar la silueta general del coche.
El diseño es un eco a los Boat Tail originales de 1932, pero no es una copia exacta. La idea se basa en los elementos náuticos, incluyendo el parabrisas redondeado que asemeja el de un bote de carreras. El perfil general recuerda a un bote de motor que surge del agua a trote completo. La parrilla frontal, un ícono de la Casa de Rolls-Royce, se ha retrabajado y se integra al diseño, dando al Boat Tail una calidad superior a modelos anteriores. El cuerpo del auto recuerda a un bote, el proceso de ensamblaje manual símil al de la construcción de yates, creando una figura que aparentemente se compone de una única lámina de metal doblada para expresar los deseos del cliente.
La parte trasera está más fuertemente influenciada por los modelos náuticos, incorporando paneles de madera con aplicaciones de acero inoxidable detallados a mano por los artesanos de la Casa. El Caleidolegno, un material usualmente usado en el interior de los Rolls-Royce, se ha adaptado para vivir en el exterior con una estética única.
“Muéstrame algo que nunca haya visto antes.”
La inspiración náutica va más allá al adoptar el color favorito del cliente, dándole matices complejos y juegos de luz y sombra difíciles de describir. Las tonalidades de azul van de lo oscuro a lo claro, con los rines en azul brillante y un degradado progresivo que lleva la atención a la parrilla frontal. El cuero del interior también presenta tonalidades variadas que ayudan a demostrar la visión enfocada al conductor que Rolls-Royce adoptó para este modelo. Los paneles de instrumentos están decorados en Guilloché, una técnica preferida por los talleres de alta relojería.
“El Boat Tail marca la culminación de la colaboración, la ambición, el esfuerzo y el tiempo.”
Un detalle finísimo es el reloj del tablero, otro ícono de Rolls-Royce. En esta ocasión, y a petición del cliente, la marca automotriz colaboró con la Casa de Bovet 1822, una marca de alta relojería suiza. El resultado son dos relojes gemelos y reversibles diseñados para poder ser usados en la muñeca o colocados en el tablero, un hito en ambas industrias y una prueba de la habilidad de ambas Casas.
No es necesario recordar la excelente ingeniería que entra en juego en el Boat Tail, no sólo en su diseño exterior sino también en sus componentes interiores. Más de 20 piezas fueron hechas a la medida exclusivamente para este coche para acomodarse a la intención del cliente de manejar el Boat Tail tan pronto como sea entregado. Cada uno de los tres autos ha sido probado y sometido a los más altos estándares para asegurar seguridad y confort junto a la velocidad.
Una nueva y emocionante era se aproxima para Rolls-Royce con la reintroducción del coachbuilding a sus servicios. El Boat Tail es el referente del lujo más recatado que Rolls-Royce puede ofrecer.
Fotos: cortesía.
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