En noviembre, Bacalar recibirá a Boca de Agua, un innovador enclave de hospitalidad adyacente a la Laguna de los Siete Colores. Concebido por la prestigiosa diseñadora Frida Escobedo, este refugio aspira a impulsar la regeneración medioambiental y social, brindando una experiencia única y relajante a sus distinguidos visitantes.
Las residencias entre árboles, las habitaciones diseñadas con elegancia atemporal y el enfoque en un turismo regenerativo definen esta propuesta. El mobiliario, concebido con identidad local y aportes de reconocidas marcas, complementa la atmósfera. Ofrece una gama de actividades a los huéspedes y destaca por su restaurante que fusiona la exquisita cocina yucateca con refinados paladares internacionales.
Con 26 habitaciones, incluyendo 22 suites, las instalaciones y servicios abarcan un abanico diverso, desde áreas comunes hasta terapias naturales, todo en armonía con la preservación ambiental. Boca de Agua, ubicado a lo largo de las cautivadoras costas de Bacalar, encarna un refugio donde la preservación ambiental armoniza perfectamente con la tranquila indulgencia. Dentro de su abrazo, los huéspedes encuentran no sólo un retiro, sino un santuario que fomenta una conexión más profunda con la naturaleza al tiempo que abraza el lujo sostenible. Aquí, la prístina Laguna de los Siete Colores y las selvas vírgenes convergen, invitando a los visitantes a saborear una mezcla única de conservación y confort refinado, un testimonio del arte de la hospitalidad responsable enmarcado por maravillas naturales.
Fotos: cortesía.
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