La Ciudad de México es uno de los centros artísticos y culturales más prominentes dentro de América Latina. En sus calles se encuentran un sinfín de talleres de artesanos y artistas, galerías cuidadosamente curadas y un espíritu innovador que vuelve de la misma ciudad un ente creativo y siempre cambiante. En medio del caos inherente a una gran ciudad, la industria del arte ha florecido entre grandes logros y dificultades, especialmente en el ámbito económico.
Fundado por Nadezhda Zinovskaya, una experta en arte originaria de Yakutia, Rusia, Ayarkut es un proyecto que busca encontrar e impulsar el crecimiento de jóvenes artistas y curadores por medio de asesorías y apoyos económicos. En palabras de su fundadora, “Ayarkut es familia: una sociedad donde buscamos ver el mundo diferente, tener nuevas ideas, y nos apoyamos unos a otros”. Hace hincapié en la necesidad de generar igualdad de oportunidades dentro del mundo de las artes, especialmente para aquellos artistas emergentes que pueden no tener los medios para financiar su educación o los materiales para su trabajo.
La esencia de Ayarkut es simple: escuchar, discutir, innovar, desarrollar. El proyecto llegará a la Ciudad de México este verano, esperando poder apoyar el florecimiento de nuevos nombres artísticos dentro y fuera de la urbe. Un nuevo horizonte se yergue para el arte mexicano: Ayarkut, con una nueva mirada al mundo del arte, promete ser parte del proceso para nivelar el piso y brindar a más artistas los medios para crear nuevas realidades.
Fotos: cortesía.
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