La Belle Époque marcó un periodo en el que la ciencia, el arte y la tecnología avanzaban con constancia, trayendo algunos de los momentos más icónicos de la humanidad con ella. Es una era que muchos extrañan con nostalgia después de los acontecimientos más complejos del Siglo XX. Caminar por los pasillos de un palacio de la época puede ayudar a sanar esta herida, y el Mandarin Oriental Ritz en Madrid es el lugar para hacerlo en España.

Reabierto en 2021 después de una renovación exhaustiva, el Ritz Madrid, ahora el Mandarín Oriental Ritz, ha albergado a las más distinguidas personalidades y dignatarios del mundo durante sus 110 años de existencia. Con 100 cuartos y 53 suites espaciosas, la decoración exuda lujo y contemporaneidad, completo con una paleta de colores relajante. Directamente en frente del Museo del Prado, la mayoría de las habitaciones gozan de vistas preciosas al perfecto diseño urbano de Madrid.

Los cuartos Superior, Deluxe y Mandarín ofrecen amplio espacio que va de los 29 a los 49 metros cuadrados, con amueblados elegantes y pisos color café profundo. Todos los cuartos tienen sistemas de entretenimiento de última generación y WiFi de alta velocidad. Las 53 suites ofrecen una amplia variedad de estancias, desde la Junior Suite, con 49 metros cuadrados, cuarto privado y ventanas con vista al patio interior, hasta la Premiere Junior Suite, con vistas a la Plaza de la Lealtad y decoración inspirada en Madrid. Las más recientes adiciones al Hotel son las Mandarín y Ritz Suites, en las torretas del hotel, completas con balcones, aplicaciones de mica, un mineral que brilla con destellos de madreperla, y vistas privilegiadas. Todos los baños están recubiertos de dolomita griega y todas las aplicaciones de cuero vienen de Córdoba, elevando los detalles al máximo nivel. Las Suites Royal y Presidencial son las más grandes del Hotel, con vistas magníficas y espacios de cocina, comedor, habitación y sala separados. Otras opciones incluyen las suites Palm Court, Par, Prado y Turret.


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El Mandarín Ritz Oriental es hogar de cinco distintos espacios gastronómicos dirigidos por el chef español Quique Dacosta, quien posee cinco estrellas Michelin en dos de sus restaurantes. Deessa, el restaurante insignia, ofrece sabores inigualables en el salón Alfonso XIII o su Cocina Show y una terraza abierta en los meses más calurosos.

El Palm Court, bajo el domo de vidrio del hotel, sirve desayunos continentales, lunch y cenas ligeras, y té de medio día, así como un concepto de bistró relajado y platillos clásicos del Ritz con un giro moderno. Pictura, el bar del Hotel, sirve una amplia oferta de coctelería y cerveza artesanal acompañadas de tapas que atrapan a los sentidos. El Champagne Bar crea una atmósfera refinada mientras que el Jardín del Ritz sirve bebidas y platillos de temporada.

Un nuevo centro de bienestar de última generación brinda una escapada del ajetreo urbano con una piscina interior, una piscina de vitalidad, regaderas de experiencia y un centro de fitness. El centro de bienestar también ofrece tratamientos que ayudan a los huéspedes a llegar a sus metas de bienestar, desde masajes de tejido profundo, faciales y pedicura que relajan el alma y el cuerpo.

Como un monumento en la diplomacia mundial, el Ritz ofrece espacios para banquetes y reuniones de distinción. Las ventanas enormes y la decoración delicada del Royal Ballroom dan la bienvenida a 160 invitados de banquete o hasta 400 invitados de cóctel, ideal para presentaciones, eventos, fiestas y reuniones. El Salón Felipe IV y el Salón real se restauraron para proveer con las más exclusivas facilidades para reuniones de negocios, eventos sociales y anuncios especiales. Los altos techos, ventanas y tecnología audiovisual de punta están a la disposición de hasta 180 invitados de cóctel.

Con un código de vestimenta y comportamiento estricto, el Ritz asegura una estancia distinguida y una atmósfera elevada para todos los huéspedes. Localizado en el Triángulo Dorado del Arte, todo respecto al Mandarín Oriental Ritz brilla con el aura de la Belle Époque madrileña.

Fotos: cortesía.

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