La bahía de Mónaco, con sus aguas azules y vistas generosas, ha sido históricamente un punto de encuentro de las familias reales europeas, dando como fruto un reino colmado de hermosos palacios y belleza sin igual. Apenas unos metros sobre el mar se alza el Hôtel de Paris Monte-Carlo, un lujoso palacio al estilo Belle Époque que data de 1864. Dotado de una arquitectura etérea y elegante en impecable estilo francés, ha sido reconocido como uno de los mejores hoteles del mundo: con 5 estrellas en la Forbes Travel Guide, dos restaurantes con estrellas Michelín y una cava legendaria, el hotel en sí mismo es una experiencia que no te puedes perder.
Las habitaciones están decoradas con sobriedad y elegancia, bañadas por el sol y la brisa del mar. Cada una es en sí una obra de arte: las Habitaciones Exclusivas son todas diferentes, y en las Diamond suites podrás tener tu propia terraza privada con vistas a la bahía o a la Place du Casino, alberca y jacuzzi. Y, si tienes un interés especial por la realeza de Montecarlo, en las Diamond suites Prince Rainier III y Princess Grace podrás encontrarte con objetos personales de los monarcas, así como sus libros predilectos, fotografías y obras de arte. Independientemente de cuál elijas, no podrás evitar maravillarte del aura de refinamiento y relajación que las envuelve.
Con semejante alojamiento las comidas no pueden ser menos que magníficas, y los restaurantes del Hôtel de Paris Monte-Carlo esperan con las puertas abiertas para satisfacer tus mayores expectativas culinarias. El restaurante insignia del hotel, el Louis XV, ostenta 3 estrellas Michelín, y, en palabras de su fundador, el chef Alain Ducasse, “la comida sabe como el mismo sol”. El icónico menú creado por Ducasse y Dominique Lory combina lo mejor de los sabores mediterráneos con frescas frutas y vegetales de la región, que se acompañan de vinos igualmente fantásticos. La cava del Hôtel de Paris es uno de sus principales atractivos: tallada a mano en la piedra de Montecarlo y con la mayor colección de vinos del mundo entero, su interior aloja un sinfín de posibilidades para los amantes de esta bebida.
Suscríbete a nuestro newsletter y recibe lo mejor para quienes viven el lujo como estilo de vida.
En el octavo piso te encontrarás con el Le Grill, un restaurante en el que literalmente cenarás a un paso de las estrellas, mientras que en los días soleados tus comidas serán servidas en medio del azul del Mediterráneo. El chef Frank Cerutti tiene una amplia trayectoria en la cocina, y lleva 23 años deleitando a los más exigentes comensales, lo que le ha ganado una estrella Michelín. Los exquisitos platos de carne y pescados a la parrilla se acompañan con pasta fresca, quesos y vegetales, así como buenos vinos cuidadosamente seleccionados para la ocasión. No podrás irte de aquí sin probar los postres; tanto los tradicionales soufflés como los sorbetes y helados de la casa te dejarán extasiado. Por otro lado, si lo que buscas es entretenerte, en el extremo opuesto del hotel te espera la Salle Empire, una joya arquitectónica con vistas a la hermosa Place du Casino considerada el epítome del art de vivre europeo. A la regia arquitectura se le suma una cocina excelente, sirviendo platos mediterráneos que combinan los mejores ingredientes de la región con recetas tradicionales. El resultado: una experiencia refinada y decadente, que además se presta para llevar a cabo espléndidos eventos.
Podrás pasar la tarde en el Bar Américain, un espacio que se transforma con el pasar de las horas y cuya decoración única al estilo de los 1920 te hará sentir como si estuvieras en una película de Hollywood. Cuenta con un amplio menú de cócteles que cambia con las estaciones, así como música en vivo de jazz, swing, blues, soul y música francesa. El glamour y el refinamiento de este bar lo convierten en el lugar ideal al que ir para relajarte y deleitar tus sentidos.
Para amenizar tu estadía, el Hôtel cuenta con canchas de tenis y squash, un idílico campo de golf de 18 hoyos, y una agenda de eventos culturales y artísticos que no querrás perderte. Asimismo, no podrás dejar de visitar las Thermes Marins Monte-Carlo, un espacio dedicado al cuidado del bienestar donde un equipo te proveerá de los mejores tratamientos acorde a tus deseos. Si de bienestar se trata, no puedes elegir mejor: el complejo cuenta con una alberca y solárium, gimnasio, jacuzzi, sauna, cuarto de vapor, duchas sensoriales, salón de belleza y boutique, además de tecnología de punta para cada uno de los tratamientos. Todos los tratamientos son personalizados, y entre masajes, faciales y sus deliciosas instalaciones, sentirás que estás flotando en el paraíso. Podrás además deleitarte en L’Hirondelle, el restaurante de las Thermes Marins, el cual sirve deliciosos platos libres de gluten, con opciones veganas y vegetarianas que se ajustan a todos los paladares. Después de una tarde de relajamiento y bienestar, estarás listo para pasar una noche inigualable en el Casino o en las muchas atracciones que ofrece la ciudad.
El Mediterráneo, con sus hermosas aguas azules y playas bañadas de sol, es un paraíso que sólo puede ser acompañado de las mejores experiencias de lujo. Fulgurando sobre la bahía de Mónaco, el Hôtel de Paris Monte-Carlo te espera con los brazos abiertos, listo para recibirte con una estadía incomparable.
Fotos: cortesía.
Comments