Cuando hablamos de los tratamientos detoxes nos referimos a quitar todos los elementos contaminantes que pueden llegar a quedar en la piel de la cara, el cuerpo o del cuero cabelludo o del mismo cabello debido a las condiciones climáticas, la contaminación, el sudor y residuos de productos que utilizamos. Estos contaminantes pueden tener un efecto negativo en el aspecto y la salud de la piel, llegando a provocar incluso condiciones adversas, por lo que eliminar y remover todo aquello que se ha quedado como un exceso sobre nuestra piel es necesario. Aquí te presentamos las mejores prácticas para desintoxicar tu cutis.
¿Cuál es el problema cuando se tienen sudor, contaminación y productos no removidos en nuestra piel?
En primer lugar, pueden causar irritación porque por lo general son agentes contaminantes; por ejemplo, el sudor al no ser bien retirado se acumula y se vuelve un elemento que puede llegar a tapar los poros, generando erupciones cutáneas y puntos negros. En el cuero cabelludo se llegan a tapar los folículos del cabello y por consiguiente hace que no se tenga un crecimiento del cabello óptimo y que tenga una densidad menor.
Otro factor importante es la intoxicación por los rayos solares. Al estar expuesta sin algún protector la piel se hace más gruesa y es más fácil que se tapen los poros, por eso el uso de protector solar en la rutina de skincare y su retoque cada 4 horas aún estando en interiores es fundamental, ya que ayuda a prevenir las aflicciones como quemaduras y otros problemas dermatológicos.
¿Cómo desintoxicar la piel?
Hacer un tratamiento detox es remover estas impurezas y cuando se presenta un número mayor de éstas se dice que la piel está intoxicada. Existen diferentes formas de desintoxicar la piel y el cuero cabelludo de acuerdo al método que se utilice.
En primer lugar está la forma mecánica que suele llamarse exfoliación que consta de frotar un producto, el cual contiene partículas, ya sean sintéticas o naturales a base de sales, azúcares o cristales de algún mineral, sobre la piel. Al hacer fricción nos ayudan a quitar estas partículas no deseadas y dejar la piel libre de residuos.
La otra manera de desintoxicación es la exfoliación química, es decir con productos que disuelven estos residuos, por lo que no hay una fricción a la piel con partículas sólidas, sino químicamente se remueven. Estos productos pueden igualmente ser sintéticos o fitoceuticos naturales
Para el cuero cabelludo existe un champú especialmente diseñado para desintoxicar, creado por la marca Davines, que contiene mentol y pequeñas partículas exfoliantes. No irrita el cuero cabelludo y se recomienda utilizarlo una vez a la semana para personas que tienen un ritmo de vida activo y están expuestos a la contaminación, sudoración, etc. Otra opción viene de la marca Keune, con un champú que no contiene granulados sino activos para remover completamente los residuos.
También, Homme Grooming Center en la Ciudad de México ofrece un tratamiento detox que con diferentes champús y mascarillas ayudan al cuero cabelludo y al cabello para que estén y luzcan saludables.
¿Cómo evitar la intoxicación?
Si bien es imposible mantenerse alejado de todos los factores intoxicantes, se pueden tomar ciertas acciones para prevenir condiciones adversas en la piel. Se recomienda hacer un detox una vez a la semana si se es una persona que realiza ejercicio constantemente, está expuesto a la contaminación, o tiende a un estilo de vida muy activo. Si su ritmo de vida es más lento, desintoxicarse dos veces al mes es suficiente. Es importante no aplicar tratamientos exfoliantes con frecuencia desmedida, pues pueden dañar la piel si se hacen en exceso. Para evitar la acumulación de productos es fundamental tener una higiene adecuada y ésta va ligada con el uso de productos de calidad, evitar los sulfatos, los silicones, productos como cera, geles o arcillas que dejen escamas, y optar por productos de marcas premium que no dejan residuos y con el baño se retiran completamente. Además, para la desintoxicación de rostro es recomendable realizar una exfoliación una vez a la semana con algunos productos como los de Port o Schaf que son a base de microgranulados, lavar el rostro con un jabón adecuado para éste de acuerdo al pH de la piel, hidratar y hacer correcto uso del protector solar.
Fotos: cortesía.
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