Al viajar uno probablemente piense en complejos vacacionales tropicales junto al mar para relajarse y escapar de los ajetreos del día a día, aunque en este momento dirigiremos la atención hacía una región impresionante y poco convencional. Ubicado en el país más septentrional del mundo, Chile, el Desierto de Atacama es el más grande y seco en el mundo, donde el lujoso hotel Nayara Alto Atacama protege la entrada a esta zona apartada y dramática.
Es en este terreno árido pero hermoso donde uno puede conectar realmente con la tierra y el paisaje rocoso. Situado en un oasis a 2,500 metros sobre el nivel del mar, Nayara Alto Atacama busca proveer un servicio auténtico, cálido y extraordinario influenciado por la riqueza cultural chilena y tradiciones locales. Las habitaciones y suites de adobe están diseñadas con líneas limpias y materiales naturales para crear una estética cruda que permite que las vistas ininterrumpidas del desierto y cordilleras sean las estrellas de la experiencia. Los techos profundos permiten una temperatura e iluminación ideal durante todo el día y los ornamentos que adornan el espacio varían desde mantas tejidas a mano y tapices de macramé que presentan toques culturales sutiles a la experiencia.
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Tal vez se alce la pregunta sobre qué hace al Desierto de Atacama tan especial. Nayara Alto Atacama ofrece varios programas para satisfacer las almas aventureras de los huéspedes, ya sea que busquen paseos en bicicleta retadores o caminatas relajantes. Algunos de los sitios prominentes del desierto incluyen el Salar de Atacama, una impresionante cordillera y laguna salada habitada por flamencos, y el Valle de la Luna, hogar de formaciones interesantes de piedra y arena con un gran rango de colores y texturas que recuerdan a la superficie lunar. Si su curiosidad va más allá del cielo, Atacama es famoso por su nula contaminación de luz artificial, convirtiéndolo en uno de los mejores lugares para observar las estrellas en toda la Tierra, y así, el hotel provee un mirador con un telescopio profesional y guías expertos.
No hay que olvidarse del viaje culinario que Nayara Alto Atacama tiene preparado. El Restaurante Ckelar basa su menú en los ingredientes tradicionales de la región– maíz, trigo y carne–combinándolos con vegetales de su propio Jardín Andino y maridaje de su colección de los mejores vinos locales. Su pabellón exterior “Quincho” se especializa en diferentes cortes de carne, maíz y papas según la técnica tradicional de cocina “Asado”. Su bar íntimo “Bar Puri” ofrece una gran variedad de juegos frescos relacionados a las terapias de su Spa que otorgan una sensación revitalizante. No importa dónde decidas embarcarte en su experiencia gastronómica, está garantizado que disfrutarás de técnicas sofisticadas y deliciosos sabores.
Nayara Alto Atacama ofrece un viaje holístico en su Puri Spa, donde varios tratamientos hacen uso de sonidos, aromas y productos locales artesanales y orgánicos. El agua es el enfoque central de la experiencia, pues es el elemento más preciado del desierto, y el Puri Spa te llevará en una travesía alrededor de sus piscinas, vapor y cuartos de relajación. Ya sea relajarse, mejorar la circulación o tonificar la piel, la extensa colección de experiencias provee algo para todos en conjunto con sus privilegiadas vistas del paisaje.
Déjate envolver en este atractivo oasis, un espacio seguro para desconectarse de las rutinas diarias y disfrutar completamente de los alrededores. Deléitate en la cordial hospitalidad en la que el equipo sobresale y date permiso de disfrutar de la energía revitalizante de este maravilloso paisaje desértico en el lujoso Nayara Alto Atacama.
Fotos: cortesía.
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